Una novela que llega precedida por un gran éxito en Francia, y que viene a ser de un escritor del mismo tipo que Trias de Bes y otros, del tema de autoayuda.
En este caso un abogado que afronta unos momentos personales bastante malos, separado hace poco, sin familia, pero con una gran vida laboral, se encuentra vacio, y gracias a la labor de una tía materna, descubre que el puede hacer del mundo un lugar mejor, y se aplica a ello con esmero, llevando la felicidad a la gente a su alrededor, quizás a mi entender de una manera ciertamente simplista, aunque efectiva.
La filosofia del libro es la de La vida es un regalo, disfrutala a tope, y para ello la novela trabaja todos los temas típicos, en este tipo de literatura.
Es una novela entretenida que se lee en un par de días, y te deja un buen sabor de boca.
---
Jonathan está pasando un mal momento... y toma una decisión: dejar de lamentarse y volcarse en los demás. Las técnicas que se utilizará para ello serán variadas: desde regalarle flores al séptimo pasajero de la línea de autobús, mandar cafés de parte de «un desconocido» o intentar hacer sonreír a su vecino pastelero, un hombre refunfuñón capaz de hacer las madalenas más deliciosas del mundo, Jonathan pondrá todo su empeño en demostrar que la vida es un regalo que merece la pena vivir plenamente.
«Jamás encontrarás la felicidad en el exterior. Puedes pasarte la vida entera corriendo detrás de miles de cosas: si buscas en el mal lugar, no encontrarás nada.»
«Jamás encontrarás la felicidad en el exterior. Puedes pasarte la vida entera corriendo detrás de miles de cosas: si buscas en el mal lugar, no encontrarás nada.»
Canta, ríe, baila, llora… ¡Vive!
La vida es un regalo, ¡disfrútala!
No intentes cambiar el mundo, ¡vívelo!
La vida es un regalo, ¡disfrútala!
No intentes cambiar el mundo, ¡vívelo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario