Un mago de Terramar es la primera entrega de la célebre saga Historias de Terramar y una obra maestra de la literatura fantástica. Publicada originalmente en 1968, esta novela no solo marcó un antes y un después en el género, sino que sigue siendo una lectura profundamente relevante gracias a la profundidad de sus personajes, su construcción de mundo y su sabiduría narrativa.
La historia sigue a Ged, un joven pastor de la isla de Gont que, gracias a sus innatas habilidades mágicas, se convierte en aprendiz de mago. Impulsado por la arrogancia y un deseo de poder, Ged desata una sombra oscura que amenaza con destruirlo a él y a su mundo. Su travesía, tanto externa como interna, lo lleva a enfrentar sus miedos y a buscar el equilibrio entre el poder y la responsabilidad.
Le Guin no solo teje una historia mágica, sino que también explora temas filosóficos profundos como la identidad, el crecimiento personal y la conexión entre el hombre y la naturaleza. Su prosa es precisa, poética y evocadora, lo que hace que el mundo de Terramar cobre vida con una fuerza visual y emocional extraordinaria.
Además, la autora desafía las convenciones del género al ofrecer un héroe cuya lucha principal es consigo mismo, más que contra un enemigo externo. Ged es un personaje complejo, lleno de defectos y virtudes, que evoluciona de manera significativa a lo largo del relato.
La edición de Minotauro (2021) destaca por su cuidada traducción, que mantiene la esencia lírica del texto original, y por su diseño de portada, ideal para quienes buscan redescubrir este clásico o introducirse por primera vez en Terramar.
En resumen, Un mago de Terramar es una obra imprescindible para los amantes de la fantasía y la literatura en general. Es un relato atemporal que combina aventura, introspección y magia, mostrando que el verdadero poder radica en el conocimiento de uno mismo.
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En el mundo de Terramar la magia es un elemento indispensable. Un principio fundamental rige ese mundo: el equilibrio entre la vida y la muerte, que pocos pueden alterar. Pasados diez años, Ged capaz ya de actuar en beneficio de otros, decide recobrar la mitad de un anillo perdido en las tumbas de Atuan; sin embargo la sacerdotisa le involucrará en las profundidades de Terramar.
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